Traza tu linea del tiempo, ya sabes: sentado teniendo una sensación de avance de algo que proviene del pasado -tu espalda por ejemplo- pasa por tí y avanza hacia adelante o bien imaginas esa línea en el suelo te situas sobre ellas y mantienes la misma sensación.
También -y es una variación- puedes organizarla como una linea imaginaria que va desde tu parte izquierda y avanza hacia el futuro en tu parte derecha.
Bien, desde este momento, proyecta todo lo que harás en el día de hoy. Y si lo haces en el suelo avanza simultáneamente con aquellos «hitos» acontecimientos que para tí son más relevantes. Anticípate a ellos y nota cómo los vives, que sensaciones te producen, cómo te anticipas a los mismos…¿los vives desde el movimiento continuo?, ¿te producen algunos de ellos monotonía, ansiedad, excitación, motivación…?
Nótalo, mañana continuamos…